El suelo pélvico, un complejo de músculos y ligamentos, cumple una función crucial al sostener los órganos pélvicos en su lugar dentro de la cavidad abdominal.

Por tanto, el correcto funcionamiento del suelo pélvico es esencial para asegurar el adecuado desempeño de la vejiga, uretra, útero, vagina y recto, así como para regular las presiones intra-abdominales.

El enfoque terapéutico busca promover, mantener y restablecer la función del suelo pélvico mediante diversas técnicas, que incluyen masajes, ejercicios específicos, estiramientos y movilización, entre otras.

Para ello, durante una consulta inicial de suelo pélvico, que suele tener una duración de aproximadamente una hora, se recopilan los datos del paciente, se realiza una historia clínica detallada y una evaluación física externa mediante pruebas específicas.

En algunos casos, puede ser necesaria una evaluación interna, siempre realizada con el consentimiento del paciente.

Por tanto, se recomienda que el paciente vista ropa cómoda, ya que es posible que durante la consulta deba permanecer en ropa interior.

Además, cualquier prueba complementaria que el paciente pueda aportar será de utilidad para un diagnóstico preciso, incluyendo radiografías, resonancias magnéticas y análisis de laboratorio.

Por último, tras recabar todos los datos clínicos, se establecen en conjunto los objetivos del tratamiento, así como la frecuencia de seguimiento y la posible derivación a otros profesionales, si fuera necesario.

Entre las patologías más comunes tratadas en nuestra clínica de suelo pélvico se incluyen:

• la incontinencia urinaria y fecal
• el estreñimiento
• los prolapsos
• el dolor pélvico
• los síntomas de la endometriosis
• las disfunciones sexuales
• los síntomas de la menopausia
• las cicatrices y los tratamientos postquirúrgicos
• así como la preparación y rehabilitación del parto
• y el tratamiento de la próstata.